En tiempos de las lavanderas .....

Hoy en día abandonados, los lavaderos no son menos evocadores de las costumbres tradicionales de la vida rural de antaño. Las riberas del canal de Nantes a Brest así como numerosos lavaderos eran frecuentados por las mujeres Rouzig para lavar la ropa.

El lavadero o " la radio local " : Punto de encuentro, el lavadero era en otros tiempos un verdadero " centro de informaciones ". En el lavadero, se encontraban las mujeres, además de las jóvenes y los niños. Los hombres solamente estaban autorizados a ayudar al transporte de la ropa pesada. El lavadero estaba prohibido a los hombres, como los cafés lo estaban a las mujeres. Era un lugar de encuentro de una gran animación. Lugar de trabajo duro, del amanecer al anochecer, hiciera bueno o malo, era ante todo un lugar de actividad intensa en el que se mezclaban el trabajo, la risa y el canto. " Er forniou red, er milinou (Repicar y andar en la procesión) " Er vez kleved ar heloiou (Las noticias vuelan) " Er poulou hag er zanaillou (Lavaderos y graneros ...) " E vez kleved ar marvaillou (Estar al tanto de las comidillas) " ( Ir a la misa y al lavadero, costumbres sagradas - Jean Renard)

Los útiles del lavadero : La carretilla sirve para el acarreo de la ropa (la palangana o el barreño está reservada a las pequeñas coladas). La caja de madera protege a la lavandera : está rellena de paja o de heno. Le paleta, el cepillo de grama son utilizados para lavar. La clásica pastilla de jabón de Marsella. El recipiente para la colada, el " azulete ", el palo son utilizados para hervir y manipular la ropa durante esta operación.

El lavadero flotante de Châteaulin : Construido a principios del siglo XX (obra autorizada por orden gubernativa de 30 de septembre de 1908), el lavadero constituía la originalidad de Châteaulin. Esta curiosidad, situada en el muelle Amiral Cosmao, prestaba grandes servicios a la población de Châteaulin : las mujeres hacían allí la colada. Esta obra, casi enteramente construida de madera, medía unos 30 metros de largo y una pasarela facilitaba el acceso a las lavanderas. De enorme capacidad, estaba alimentado por agua corriente. Sin embargo, durante las frecuentes inundaciones, el lavadero se volvía inutilizable. A cada crecida, era de nuevo puesto a flote. Desapareció al fin de los años 1960.